Hasta 1988 Visconti, la firma que trajo la escritura a Florencia después de un período de olvido de más de 30 años, ha convertido la artesanía florentina en un icono de su producción que acompaña a sus valores fundamentales de la pasión, el arte y la tecnología.
Hasta 1988 Visconti, la firma que trajo la escritura a Florencia después de un período de olvido de más de 30 años, ha convertido la artesanía florentina en un icono de su producción que acompaña a sus valores fundamentales de la pasión, el arte y la tecnología.